La inteligencia creativa es un término que está de moda. Sobre este término se escriben post, se producen podcast y se registra miles de búsquedas en Google cada día de personas que se interesan sobre esta metodología. Pero, ¿qué queremos decir cuando decimos inteligencia creativa?

¿Qué es la inteligencia creativa?

La inteligencia creativa no es nada nuevo. Es otra forma diferente de llamar a una forma de hacer las cosas que ha tenido múltiples variantes y nombres a lo largo de la historia: conocido es, por ejemplo, el término “pensamiento lateral”.

Este concepto hace referencia a una manera de pensar que suma, por un lado, nuestros conocimientos y aptitudes (nuestro intelecto) y por otro lado nuestra capacidad de aplicar la imaginación como un recurso práctico. Seguramente habremos leído en múltiples ocasiones que cada uno de los hemisferios de nuestro cerebro posee unas habilidades distintas: uno es racional y lógico, mientras el otro es creativo e imaginativo. La inteligencia creativa podría definirse, de forma simplificada, como el uso coherente y complementario de los dos hemisferios de nuestro cerebro. 

Esta forma de pensar nos puede ayudar a encontrar nuevas soluciones o nuevas ideas con las que afrontar problemas y retos conocidos o futuros. Un equipo o trabajador que posea inteligencia creativa será capaz de enfrentarse a situaciones del día a día o a eventualidades importantes de forma más resolutiva y eficaz, haciendo un uso óptimo de todas sus herramientas. En una sociedad como la actual donde la convivencia con la incertidumbre se ha convertido en una certeza, poseer una buena combinación de inteligencia y creatividad nos ayuda a enfrentarnos a posibles escenarios futuros, al caos.

¿Cómo aplicar la inteligencia creativa en el copywriting?

En el mundo empresarial la inteligencia creativa nos ayuda a introducir de forma crítica, controlada y útil la creatividad. Sin embargo, el copywriting ya es una tarea vinculada con la imaginación y la creatividad. En esta tarea, el copywriter puede incorporar la inteligencia creativa como una metodología de trabajo que le ayude a ordenar y sistematizar este trabajo.

Es de vital importancia para poder aplicarla de forma correcta, poseer una serie de conocimientos y saberes que nos sirvan de base a nuestro trabajo creativo. Por ello, el primer paso del copywriter que aspire a tener esta habilidad no será otra que la de ser un ávido lector. El propio Stephen King, conocido por ser uno de los escritores más prolíficos, recomienda a todos los escritores noveles leer y volver a leer como regla número uno para escribir bien.

Algunos consejos para aplicar la inteligencia creativa en el copywriting pueden ser:

• Leer mucho.

• Fijarnos objetivos antes de comenzar a escribir.

• Anotar, a modo de lluvia de ideas, referencias que conozcamos.

• Hacer un listado de conceptos que queremos hilar.

• Explorar diferentes formas de fomentar nuestra creatividad.

• Usar tarjetas para apuntar ideas que nos puedan servir en el futuro.

• Tener a mano un cuadro resumen con las principales ideas de la guía de tono de voz.

• Si no tenemos una guía de tono de voz, definir previamente de forma rápida el tono de voz.

• Trabajar mucho, y que la inspiración te pille trabajando.